Sobrevolar el océano, acompañados por el Electro Swing

El electro swing es otros de esos subgéneros de música electrónica que si bien surgieron a partir de experimentaciones en la escena musical underground durante la década de 1990, ha resurgido en la actualidad para el disfrute masivo impactando la música comercial tanto en las demandas del mercado como en las pistas de baile. Tal como su nombre sugiere el electro swing es la mezcla de esa parte melódica y bailable del jazz llamada swing fusionado con los potentes beats de la electrónica, principalmente el house pero también con la inserción del elementos propios del trip hop, el hip hop y el EDM (electronic dance music) compartiendo el espíritu contemporáneo del dance pop vigente.

La fundación de este inusual subgénero dentro de la música electrónica se le atribuye al DJ austríaco Marcus Fereder, mejor conocido por su nombre artístico Parov Stelar, durante su recorrido por discotecas como disc jockey hasta fundar su propio sello discográfico Etage Noir. Su trabajo pionero en mezclas electro swing no tardo en alcanzar popularidad a lo largo del continente europeo y posteriormente en el resto del mundo. Sin embargo, si existe alguien que encarna mejor que nadie la naturaleza sobria y refrescante del electro swing es el grupo francés Caravan Palace, los cuales han ido creando su propia identidad musical a menudo replicada por otros artistas similares. Su trabajo incluye canciones que apropian canciones swing de la década de 1920 a la cual se le agregan una efectiva mezcla de samples, loops y otros efectos. A manera de homenaje y también de vanguardia, tanto la estética como la música de este grupo reflejan el encanto del electro swing como un puente entre el pasado y el futuro confluyendo en el presente de cualquier escenario dispuesto para la danza.

El electro swing también ha logrado extender su influencia en algunas bandas sonoras y soundtracks recientes, como un signo de anacronismo posmoderno que va en conjunto con el espíritu de la época. Películas como "The Great Gatsby" o "La Grande Bellezza" son realzadas por el uso de canciones electro swing dentro de su banda sonora.